La Tenaz Ilusión de "Existir Solo como Ser Humano Personal"
Por Manuel Arduino
Introducción
La idea de que existimos únicamente como seres humanos individuales es una ilusión, según la Oculta Tradición de las Edades. En realidad, cada ser viviente es una compleja convergencia de jerarquías cósmicas, planetarias y naturales, que sobrepasa la noción de una identidad personal. Este artículo explora cómo las fuerzas espirituales y materiales contribuyen al mantenimiento y desarrollo de cada ser humano, visto como un Espíritu Planetario Colectivo, una entidad que trasciende lo meramente individual.
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1. Existencia Humana como Convergencia Cósmica
Para entender la verdadera naturaleza de la existencia, debemos verla como una "galaxia de galaxias" de fuerzas cósmicas que convergen en cada individuo. Según la Tradición Esotérica, "la unidad en el universo se manifiesta a través de múltiples formas, todas interconectadas" (Bailey, 1951). Cada ser humano alberga no solo una conciencia individual, sino una agregación de energías cósmicas y planetarias que operan en cada átomo, formando una red de interacciones que constituyen la verdadera esencia de su existencia.
Comentario: En esta visión, la vida humana es una expresión de fuerzas que se extienden más allá del plano material. Estas fuerzas conforman un entramado de conexiones cósmicas, que reflejan la naturaleza expansiva y jerárquica de la conciencia universal.
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2. Espíritu Planetario Colectivo y la Naturaleza Expandida del Ser
La identidad humana puede describirse como un Espíritu Planetario Colectivo (Dhyani Chohan), un poder sumatorio y expansivo que no solo contiene el universo, sino que lo compenetra. Esta fuerza es el resultado de núcleos luminosos y energías que abarcan el cosmos. Leadbeater (1927) describe este Espíritu Planetario como "una manifestación colectiva que refleja el poder de la conciencia universal". Este poder va más allá de la percepción individual, integrando a cada ser en una relación íntima con la totalidad cósmica.
Comentario: Este concepto sugiere que la conciencia personal es, en realidad, un reflejo de la conciencia universal. Cada ser humano es un fragmento de esta energía cósmica, que nos recuerda nuestra interconexión con el universo en todos sus niveles.
3. La Agregación de Fuerzas y la Unidad Consciente
Todo ser humano es una "centralidad viva", una unidad compuesta de múltiples fuerzas conscientes y convergentes que permiten la manifestación de la Fuerza Fohática (energía primordial). Esta energía se manifiesta a través de los chakras y otros centros de poder, conectando al individuo con el Factor Puntual Uno o Sagrado Núcleo del Espacio Abstracto. Esta conexión permite que la conciencia y el poder se expandan, reflejando nuestra identidad como partes de un todo universal.
Conclusión
La noción de que existimos únicamente como seres individuales es limitada. Desde el punto de vista esotérico, el ser humano es una convergencia de fuerzas cósmicas y energías universales que le otorgan un rol en el esquema cósmico. Al entender esta realidad, trascendemos la visión individualista y nos acercamos a la conciencia universal.
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Referencias
Leadbeater, C. W. (1927). The Chakras. Theosophical Publishing House.
Bailey, A. (1951). Esoteric Healing. Lucis Publishing Company.
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